
El pasado sábado, 28.08.2021 nos dejó Juan Antonio Esteban, mi gran amigo JUANAN.
Ya el domingo en el tanatorio repleto de gente, constaté lo que ya sabía, Juanan era muy respetado y admirado profesionalmente y aún más querido personalmente. En estos días está siendo abrumador la de mensajes que estoy recibiendo, la de noticias en las redes comunicando con mucho pesar su fallecimiento.
Aunque llevábamos unas semanas esperando el triste desenlace, nos sorprendió la rapidez con la que se nos fue y reconozco que no estábamos preparados, el mazazo emocional ha sido enorme. Me cuesta creer que ya no esté, tanto que no he podido escribir estas líneas hasta hoy, ya empezando a asimilar su terrible pérdida.
Juanan fue un gran amigo, una persona sensible, hogareña, generosa, culta, discreta, con un sentido del humor increíble. Cuando lo conocías por primera vez, con su tono de voz suave, siempre correcto, no podías imaginar la de risas que te iba a garantizar y ¡la de barbaridades que te soltaba cuando había confianza y que no pondré aquí por respeto al lector! ¡Qué culto era, cuánto leía, qué difícil regalarle libros, los tenía todos!
Juanan no daba nunca nada por perdido, luchaba hasta el último suspiro. Su mensaje en el wasap ya te lo advertía «Nunca la bandera arriada… nunca el último empeño».
Nuestro amigo ponía pasión en todo lo que hacía, como director de RRHH de ALSA me encantaba oirle hablar ilusionado de todo lo que estaba implementando su empresa para incorporar más mujeres en un sector (conducción de autobuses) muy masculinizado o cómo con su programa de prácticas estaban ayudando a incorporarse a jóvenes en su primer empleo. Si le oías hablar de su faceta docente, fue profesor en IE Business School, te ilusionaba su afán transformador para crecimiento de los estudiantes. Como coach ejecutivo y cofundador de la AEDRH (Asociación Española de Directores de RRHH) te dabas cuenta de su extenso conocimiento de la función de RRHH y cómo siempre ponía a las personas en el centro para tomar cualquier decisión.
Y así conocí a Juanan, por ese interés en las personas, gracias al proyecto literario de escRHitores. Nos unió la escritura desde una perspectiva de RRHH, queríamos hablar de las personas, de sus sentimientos, emociones, valores… en definitiva, de lo importante.

Juntos, parimos un universo de ficción (Green Technologies e Irene Díaz de Otazu) plasmado en dos libros maravillosos, RRelatos y RRetratos HHumanos, con una complicidad deliciosa, disfrutando de nuestra nueva amistad, descubriéndonos mutuamente. Fue un lujo dejarse recomendar libros inspiradores, dejarse liar con presentaciones originales de los libros viajando a otras ciudades (¡por supuesto en autobuses ALSA!). Fue Juanan quien nos instó a abrir el blog de escRHitores. Él ya tenía experiencia con su blog propio que te recomiendo leer http://jaesteban.es/
Juanan disfrutaba de la vida, le gustaba cocinar y comer, nos mandaba continuamente fotos de platos deliciosos, cachopo, pulpo, fabada, filloas, todo ligerito… y luego para bajar los atracones corría mucho (yo le fidelicé para Skechers, en broma nos hizo de modelo posando con todas las zapatillas que tenía…). Corrió hasta 8 maratones y eso que fue una vocación tardía como él mismo reconocía. Era un bestia al que todos admirábamos. Llevaba un ritmo frenético, incluyendo viajes a Sudamérica para impartir maravillosas ponencias.

Hasta que tuvo que parar, una enfermedad de su amada Lourdes lo dejó KO. Le vimos consumirse durante meses cuidando de su amor hasta sus últimos días, sufrimos con y por él mientras Lourdes se iba debilitando más y más hasta que nos dejó, hace ya más de un año. En el tanatorio, en plena pandemia, Juanan nos reunió a los escRHitores y nos pidió que escribiéramos nuestro tercer libro, RRetos HHumanos, como un acto de amor y reconocimiento a Lourdes.
Juanan, siempre vitalista, reformó su casa, llegué a verla, preciosa, toda gris, muy moderna, con una librería soberbia, como no podía ser menos y las habitaciones de sus dos hijos con un gusto exquisito. Así era Juanan, cuando hacía algo, lo hacía muy pero que muy bien. Teníamos pendiente en su nueva casa una fiesta para celebrar el libro que en breve verá la luz.

RRetos HHumanos finalmente irá dedicado a Lourdes y a Juanan. Me consuela saber que perdurarán unas líneas para mostrar un breve reflejo de cómo era Juanan y un atisbo de nuestra amistad (imposible plasmar todo en un libro de relatos, Juanan era mucho Juanan y había que conocerle de cerca para sacar todo su jugo).
Hace un mes estuve en su casa, en mi fuero interno sabía que iba a despedirme, como por desgracia así ha sido. La vida puede ser muy injusta y desde luego con Juanan se ha mostrado al final especialmente cruel. Ya muy debilitado, nos fundimos en un abrazo tan intenso que nunca olvidaré, pues me transmitió en unos segundos su miedo, su paz, su fortaleza, su sensatez y sobre todo una generosidad enorme. Me impresionó y me sigue impresionando. Preocupado por dejar todo bien atado, ocupándose de todo y de todos hasta el final. Con la mente fría y el corazón enardecido en cada una de sus últimas decisiones.
GRACIAS JUANAN por tu amistad. Nunca te olvidaré. D.E.P.